La diputada entiende que este enfrentamiento se debe a un afán de Casado de «asegurarse el poder» frente a «una persona que se ha convertido en la líder más popular del centro derecha en décadas»
La diputada popular Cayetana Álvarez de Toledo ha insistido en pedir la dimisión del líder del PP, Pablo Casado, porque ha hecho hoy «algo de la máxima gravedad» al «pisotear el principio sacrosanto en una democracia de la presunción de inocencia».
En la presentación en Cádiz de su libro «Políticamente indeseable», Cayetana Álvarez de Toledo ha afirmado que Pablo Casado ha acusado hoy a la presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, de corrupción «en base a infundios, maledicencias, sospechas, en fin, autocronstruidas, o desde luego infladas, sin pruebas, sin datos, sin documentos, sin nada».
«Eso no se puede hacer en un Estado de Derecho, en un orden democrático y, desde luego, no lo puede hacer una persona que aspira a presidir el gobierno de la nación, contra nadie y menos contra una compañera», ha insistido.
La diputada popular ha pedido un congreso extraordinario del partido «lo antes posible» para que los militantes elijan una nueva dirección que pueda «reconstruir lo que en estos meses se ha destruido» y ha advertido que, en su opinión, esas bases del PP «quieren mucho a Ayuso».
A su juicio «nadie ha hecho más para perpetuar a Sánchez y engordar a Vox» que Pablo Casado y Teodoro García Egea.
Entiende que este enfrentamiento se debe a un afán de Pablo Casado de «asegurarse el poder» frente a «una persona que se ha convertido en la líder más popular del centro derecha en décadas».
Álvarez de Toledo ha defendido las explicaciones ofrecidas hoy por Díaz Ayuso cuando ha reconocido que su hermano cobró 55.000 euros por conseguir mascarillas en China para un contrato con su gobierno: «se le paga por el trabajo realizado, no por contratar, eso es una perversa tergiversación».
Fuente: EFE
