El órgano contrae en una décima su anterior previsión, pero destaca el «elevado dinamismo» de la economía española
El Banco de España ha avanzado un crecimiento del PIB para el tercer trimestre del 2,7%, gracias a la buena evolución del empleo, del consumo de los hogares y de la inversión empresarial y en vivienda, aunque esa tasa es una décima inferior al incremento del 2,8% del segundo trimestre.
Según la entidad, la reducción de la probabilidad de infección y la menor gravedad de los casos de covid-19 entre la población vacunada han permitido seguir relajando las medidas de contención, lo que ha favorecido la continuidad del «elevado dinamismo» económico de la primavera, sobre todo en las ramas de servicios más afectadas por las limitaciones.
La evolución del empleo ha mantenido un perfil de progresiva mejoría, coherente con un repunte de las horas trabajadas y con un descenso de la tasa de paro, hasta el entorno del 14,5%, con una mejor evolución en las actividades que más han sufrido con la pandemia de la covid, como la hostelería.
El gasto dependerá de la inflación
El informe augura que el gasto de los hogares seguirá siendo pujante, debido a la mejora del mercado de trabajo, aunque dependerá del destino que los consumidores decidan dar a la bolsa de ahorro acumulada desde el inicio de la pandemia.
En sentido contrario, señala que la inflación, por el encarecimiento reciente de la cesta de bienes y servicios de consumo, tenderá a comprimir el poder de compra de los hogares.
El índice de precios de consumo armonizado ha subido hasta el 3,1%, si bien la entidad considera que ese aumento es en principio transitorio, al igual que las presiones inflacionistas a escala global.
Fuente: EFE.
