El comunicador pidió «libertad para poder hablar en público sin que no te den una paliza mediática»
El presentador de El Hormiguero, Pablo Motos, quiso acabar este miércoles su programa con un discurso que ha sido muy elogiado en las redes sociales.
Motos comenzó diciendo, con aires de agotamiento, que «no podía más» con «lo políticamente correcto». A partir de ahí, comenzó una reflexión en la que criticó » a los quejicas y a los que sin tener ni idea de la vida se atreven a dar lecciones desde el ordenador».
«Ha llegado el momento de hacer una catarsis, de hablar de la vida de verdad», señaló el presentador de Antena 3, «la vida es salvaje, es injusta, es cruel y no es neutra. Esto es lo que hay y tenemos que tener libertad para poder hablar en público sin editar mentalmente la conversación para que no te den una paliza mediática«.
«¿Sabéis lo que persiguen? Que nos enfrentemos, que nos enfademos por todo. Que nos separemos. Porque así no pensamos, porque pensar es peligroso: podrías cambiar de opinión. Así que de vez en cuando hay que pasarse de la raya, hay que probar lo prohibido. Y que pase lo que tenga que pasar», remató Motos.
El presentador de El Hormiguero continuó después hablando sobre el rencor, que «no daña a quien supuestamente lo provoca, sino a quien lo padece».
«Vivir resentido es como cavarse un hoyo del que cada vez cuesta más escapar. Y, sin embargo, cómo nos gusta a todos hundirnos en ese hoyo y revolcarnos en el fango del rencor. Cómo buscamos el menor motivo para bebernos un buen trago de ese veneno que no va a matar al enemigo pero que nos va a amargar la vida. Porque el rencor nos hace peores personas».
