Mientras Podemos propone una empresa pública para controlar el precio de la luz, las eléctricas municipales de Barcelona y Cádiz se rinden a la evidencia
Las empresas eléctricas de titularidad pública que los alcaldes de Barcelona y Cádiz, Ada Colau y José María González ‘Kichi’, pusieron en marcha en su día para ofrecer a sus ciudadanos una factura de la luz asequible se han rendido a la realidad del mercado de la luz español.
En un mes en el que el recibo de la luz ha batido seis veces su propio récord, las compañías Barcelona Energía y Eléctrica de Cádiz, gestionadas por los Ayuntamientos de la Ciudad Condal y de la capital gaditana, no han tenido más remedio que adecuar sus tarifas a la reciente escalada de los precios.
Tal y como adelanta el diario El Mundo, ambas empresas no pueden permitirse asumir las tremendas pérdidas que supondría continuar con las tasas actuales, por lo que han comunicado a sus clientes que estas se actualizarán próximamente. Ante la subida de la luz, «nos vemos obligados, muy a nuestro pesar», reza la carta que la energética gaditana ha dirigido a sus contratantes, «a tener que actualizar los precios acordes a la nueva situación, de forma que a partir del 1 de septiembre cambiarán todos los precios de la energía en nuestras tarifas».
De esta forma, la eléctrica puesta en marcha por ‘Kichi’ supera con creces a las ofertas de otras empresas energéticas, incluidas Endesa o Iberdrola. Por su parte, Barcelona Energía ha alzado sus tasas una media del 16%.
