El barón socialista ha insistido en ningún caso los indultos pueden tener un perfil político o dar la apariencia de una «transacción»
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, se ha mostrado este jueves contundente a la hora de rechazar los indultos que valora conceder el Gobierno a los líderes independentistas condenados por el juicio del ‘procés’.
El barón socialista ha señalado que la concesión de las medidas de gracia «será uno de los graves errores de la democracia en el caso de que se produzcan» y ha deseado «con toda el alma y con todas las fuerzas que no se tome esta decisión». «Más que una medida de gracia, me parecería una enorme desgracia», ha añadido García-Page.
El presidente castellano-manchego ha hecho referencia a la falta de arrepentimiento de los condenados puesta de manifiesto por el Tribunal Supremo en su dictamen publicado este miércoles y se ha preguntado por la posición en quedaría el que toma la decisión de indultar «sin garantizarse primero la renuncia expresa a volver a las andadas». «Creo que iríamos a un escenario de frustración colectiva y constitucional de una enorme envergadura», ha señalado.
García-Page ha insistido en que bajo ninguna circunstancia los indultos pueden tener un perfil político o dar la apariencia de una «transacción» o una «cesión», porque «eso es exactamente lo contrario de una medida de gracia, que a mí no me da ninguna gracia».
Por último, el presidente de Castilla-La Mancha ha afirmado que «en estos momentos y en estas condiciones, una decisión de indultos no ayudaría en el fondo a enfocar el problema de Cataluña. Es más, tiene muchas posibilidades de resultar estéril«.
