Los casos descubiertos en Israel y Cataluña simplemente son una coinfección de gripe y coronavirus, algo que ya ha ocurrido en el pasado
El aumento de contagios de coronavirus que lleva dándose ya unos cuantos días en España ha traído consigo ahora una nueva preocupación entre los ciudadanos, que no debería ser tal. Se trata de flurona, una patología con la que algunos ya se llevan las manos a la cabeza: nueva enfermedad, nuevo virus, nueva variante, más gravedad, algo novedoso… La psicosis al poder, a pesar de que esta no tiene ni pies ni cabeza.
¿Por qué? Flurona es ni más ni menos que padecer a la vez tanto gripe como coronavirus. Algo en absoluto de nueva cuña, a pesar de que se hable de primeros casos tanto en Israel como en Cataluña: la coinfección de gripe y covid es algo prácticamente tan viejo como la actual pandemia, ya que aparece reseñada en papers de The Lancet y los CDC de Estados Unidos en 2020. Con más exactitud, en mayo y junio de ese año respectivamente.
De hecho, los casos detectados en Cataluña son pocos y no presentan una evolución más grave que el contagio solo por coronavirus. Tanto es así que la directora del Servicio Catalán de la Salud, Gemma Craywinckel, ha dejado claro que «son anecdóticos y no tienen más relevancia». Esta doctora también ha remarcado que si bien no es lo más frecuente, en un momento de alta circulación de virus puede producirse una coexistencia de dos patógenos en un cuerpo.
En términos parecidos se expresó Arnon Vizhnitser, director del departamento de ginecología del Hospital de Beilinson (Israel), en The Times of Israel: «La enfermedad es la misma. Son virales y causan dificultad para respirar, ya que ambas atacan las vías respiratorias superiores».
Por tanto, y aunque todavía hay poca evidencia científica al respecto, no hay nada alarmante con respecto a flurona ni en cuanto a síntomas, que son los de una infección respiratoria común, ni en cuanto a gravedad, puesto que se trata de algo leve.
