Los indocumentados a menudo dejan que sus dolencias médicas no sean tratadas por temor a su estatus migratorio
Un estudio realizado en Nueva York revela que el temor de los inmigrantes indocumentados a la separación familiar, la detención y la deportación, presente bajo la Administración republicana del presidente Donald Trump aún persiste con Joe Biden en la Casa Blanca, y afecta a su acceso a beneficios y servicios públicos.
El informe ‘Uso de programas, servicios y beneficios de la ciudad de Nueva York por parte de inmigrantes: examen del impacto del miedo y otras barreras’, del Centro de Estudios Migratorios (CMS por siglas en inglés), determinó que aunque esta es una ciudad «favorable» a los inmigrantes e invierte recursos en ellos, necesita derribar barreras con que estos se encuentran.
El CMS, con sede en Nuevas York, examinó el miedo y otras barreras en el uso de beneficios públicos como la salud, así como el acceso a la aplicación de la ley y a los tribunales, a través de entrevistas en ocho idiomas a inmigrantes de hasta 30 países entre enero del 2020 y octubre del 2021.
Bajo la «regla de carga pública» que entró en vigor el 24 de febrero del 2020, -que ya no está en efecto pero aún hay confusión- se podía negar la residencia legal permanente («green card») a los inmigrantes que hubiesen recibido o recibieran beneficios públicos.
Uno de los temores más recurrentes que explican el recelo de los inmigrantes a la hora de ir al hospital es la presencia de agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) que podrían detenerlos.
Varios trabajadores del hospital dijeron que los inmigrantes indocumentados a menudo dejan que sus dolencias no sean tratadas por temor a su estatus migratorio y, como resultado, sus enfermedades se convierten en emergencias, advierte el estudio.
Fuente: EFE.
