Según las primeras estimaciones, miles de viviendas se vieron afectadas por los bombardeos durante la escalada con Israel
Tras la tregua alcanzada el viernes, la coordinadora de la ONU para la ayuda humanitaria a Palestina, Lynn Hastings, hizo el domingo un llamamiento a la comunidad internacional para reconstruir los daños producidos en la Franja de Gaza tras once días de escalada bélica.
«Un mensaje que he escuchado repetidamente es que la gente en Gaza está más traumatizada que nunca, que se siente impotente y que ya no tiene esperanza. Los padres dicen que no pueden asegurar a sus hijos que esto no volverá a suceder. ¿Cómo hacerlo después de tantas guerras?», declaró hoy la coordinadora humanitaria de la ONU en la región, Lynn Hastings, en una visita al dañado enclave costero.
Durante el intercambio de fuego, los ataques de Israel por tierra y aire destruyeron gran parte de la infraestructura, incluidas carreteras y calles principales. En concreto, más de mil unidades residenciales y comercios, 56 instalaciones educativas, seis hospitales y once clínicas han quedado afectadas y 800.000 personas tienen hoy problemas de acceso a agua regular, según la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios.
Además, el subsecretario del Ministerio de Obras Públicas y Vivienda en Gaza, Naji Sarhan, calcula que las pérdidas económicas por la demolición de edificios e instalaciones residenciales ascienden a más de 123 millones, y que el Ministerio, controlado por el movimiento islamista Hamás, necesita al menos 287 millones para reconstruir el sector de la vivienda, que sufrió graves daños.
Asunto humanitario
La respuesta humanitaria se ha activado, mientras, en política, la región espera la llegada este miércoles del secretario de Estado de Estados Unidos, Anthony Blinken, para afianzar la tregua entre Israel y las milicias palestinas, pero de momento nadie ha puesto en la agenda el bloqueo que lastra la economía de la Franja palestina, que una vez más tiene que ser reconstruida.
«La escalada ha exacerbado una situación humanitaria ya terrible en Gaza, generada por casi 14 años de bloqueo y divisiones políticas internas, junto con hostilidades recurrentes», dijo hoy Hastings, la coordinadora humanitaria de la ONU, quien pidió «un diálogo serio para lograr una solución justa y duradera para todos».
Los enfrentamientos de esta última escalada bélica, la peor desde 2014, han costado la vida de al menos 248 palestinos, incluidos 66 menores. Doce personas, dos de ellas menores, han muerto en Israel durante estos once días de intercambio de fuego.
