A partir del lunes 24 de mayo también se ampliarán los aforos de actividades culturales hasta el 70 % y de los comercios hasta el 50 %
Los bares y restaurantes de Cataluña podrán abrir hasta las 24 horas a partir del lunes, cuando también se permitirán reuniones de hasta 10 personas, en vez de las seis establecidas hasta ahora. Así lo han confirmado fuentes del Gobierno, todo ello debido a la buena evolución de los indicadores epidémicos.
El límite de diez personas deberá ser ratificado por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), al afectar al derecho fundamental de reunión.
La consellera de Salud, Alba Vergés, y el conseller de Interior, Miquel Sàmper, comparecerán en rueda de prensa el jueves para dar cuenta de los acuerdos adoptados por el plan de Protección Civil Procicat para relajar la medidas restrictivas en Cataluña a partir del lunes.
La semana pasada, Vergés y Sàmper ya anunciaron que, a partir del lunes 24 de mayo, se ampliaban los aforos de actividades culturales hasta el 70 % y de los comercios hasta el 50 %, mientras que la restauración podía abrir antes para los desayunos, a las 06.00 horas.
Ante la buena evolución de la epidemia, las restricciones se han suavizado más para la próxima semana: la novedad es que bares y restaurantes también ampliarán su horario límite de cierre por la noche, de las 23.00 horas actuales a las 24.00 horas, de manera que podrán servir de las 06.00 horas hasta la medianoche.
Todo ello después de que la Guardia Urbana y los Mossos d’Esquadra tuvieran que desalojar a miles de personas que hacían «botellones» en las playas de Barcelona y en otros puntos céntricos de la ciudad el pasado fin de semana, el primero entero sin toque de queda nocturno.
Otra novedad es que el Procicat amplía a partir del lunes el límite de las reuniones en interiores y exteriores, de seis a diez personas, algo que deberá avalar el TSJC, instancia que en todo caso ya validó la anterior medida, más restrictiva.
En una entrevista en ‘Cadena Ser Cataluña’, Vergés ha remarcado que se están produciendo unos datos de contagios «que no se veían desde hace mucho tiempo» y el 70 % de los mayores de 50 años ya tienen una vacuna puesta, así que no hay un «riesgo evidente» de rebrote de la COVID-19, si bien «la epidemia no ha terminado», ha subrayado.
