Díaz ha explicado en una entrevista que su única intención en política es abrir un «proceso de escucha» para que el protagonismo lo tenga la sociedad española
La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, reconoce que tiene «miedo» a despertar demasiadas expectativas y asegura que no le gustaría ser presidenta del Gobierno, pero insiste en su idea de impulsar un «proceso de escucha» para crear una nueva plataforma en las próximas elecciones.
En una entrevista en ‘Yo Dona’, Díaz ha hablado de su carrera política, de cómo está afrontando ser ministra y de cómo le ha cambiado la vida tras llegar a formar parte del Gobierno de España.
Preguntada por si sería presidenta del Gobierno, Díaz responde con un «no» rotundo e indica: «Yo no elegí estar aquí».
«Mi vida ha cambiado mucho y ahora mismo no estoy en esas. Si me fuera a presentar a las elecciones y tuviera esa vocación, lo diría públicamente, porque la ciudadanía tiene derecho a saberlo. Es verdad que en el acto que organizamos en Valencia todo el mundo estaba muy feliz, pero yo me iba escondiendo en el sofá, abrumada…», responde Díaz a la pregunta sobre si sería o no presidenta del Gobierno.
Además, Díaz también ha explicado en la entrevista que ella tampoco quería ser ministra ni vicepresidenta y al final ha acabado siéndolo.
«Tengo perfil propio y estoy en otra cosa», comenta Díaz, que agradece la confianza de Iglesias para asumir la vicepresidencia del Gobierno en representación de Unidas Podemos, aunque recalca que ella hace las cosas «de otra manera».
Le da «miedo» estar creando demasiadas expectativas, porque es «un ser humano pequeñito» y no tiene partido propio, y de hecho se sintió «abrumada» por el acto celebrado en Valencia junto con otras mujeres líderes en la política, como Mónica Oltra, Ada Colau y Mónica García.
Un acto que ha sido interpretado como un primer paso para la creación de la nueva plataforma que Díaz quiere impulsar con la vista puesta en las próximas elecciones generales, previstas en 2023, y en la que la vicepresidenta dice que no lo importante no es «el quién» sino el «qué» van a hacer.
Su intención, remarca, es abrir un «proceso de escucha» para que el protagonismo lo tenga la sociedad española, aunque es consciente de que «es muy difícil hacer las cosas sin partido».
«Lo que quiero, con todo el cariño, es que este Gobierno culmine la legislatura, que cumplamos con los proyectos que hemos presentado a la sociedad española. No quiero distraerme. Cuando lleguen las elecciones ya veremos», declara.
