El tenista castellonense se ha clasificado este viernes para la final del torneo de Adelaida 2, horas después de protagonizar una escena muy tierna tras otra victoria
Roberto Bautista luchará este fin de semana por hacerse con la victoria final en el torneo de Adelaida 2. El tenista castellonense, tercer jugador español con más finales sobre pista dura, ha superado este viernes en semifinales al local Thanasi Kokkinakis en tres sets: 7-6(4), 3-6, 6-3. Su próximo rival será el surcoreano Soonwoo Kwon, que dejó por el camino al británico Jack Draper en su semifinal e intentará acabar con el momento dulce de Bautista en tierras australianas.
Una felicidad contagiosa, como se pudo comprobar este jueves tras superar el español los cuartos de final de la competición. Nada más ganar y cuando estaba realizando la tradicional entrevista postpartido, Bautista se sonrió: su hijo acababa de saltar a la pista y no tardó en dirigirse correteando hasta donde él se encontraba.
Tras los gestos cariñosos de rigor, el entrevistador le preguntó a Bautista si el pequeño, al que ahora tenía en brazos, se trataba de «Roberto Junior», a lo que el jugador asintió. «¡Es guapo!», le piropearon también al tenista. «¡Gracias! Por mi mujer», contestó entre risas por alusiones. «¿Sabe decir algo?», le cuestionaron a continuación. «Muy pocas palabras», reconoció Bautista, a lo que desde la organización, con sorna, apostillaron: «Como su padre».
«Ves con la mama», le dijo entonces el jugador a su hijo, que salió de la posición de entrevistas tan rápido como pudo en cuanto su padre le devolvió al suelo. Antes de abandonar la pista tras una nueva carrera, el niño no dudó en dedicar unos gestos divertidos a la grada. «Parece deportista también», le comentaron entonces a Bautista. «Sí, le gusta jugar al tenis. Disfruta cualquier cosa que tenga una pelota de por medio. Viaja conmigo desde que nació y disfrutamos un montón estando juntos«, sentenció el actual número 26 del ranking ATP.
