El individuo fue advertido en repetidas ocasiones de que se le dispararía con una pistola táser si no dejaba de resistirse a su detención
Keenan Anderson, un hombre de 31 años y primo de la cofundadora del movimiento Black Lives Matters Patrisse Cullors, falleció el pasado 3 de enero tras ser alcanzado con una pistola táser mientras huía de la policía.
Los hechos ocurrieron en la ciudad de Los Ángeles (Estados Unidos) y se han dado a conocer tras la publicación por parte del Departamento de Policía de la ciudad de las imágenes del suceso. Las autoridades han informado de que Anderson estuvo involucrado en un accidente de tráfico en el barrio de Venice, sobre las 15.00 hora local. Al parecer, el individuo escapó del lugar de los hechos tratando de «introducirse en el vehículo de otra persona sin su permiso».
En las imágenes distribuidas por la policía, puede verse cómo Anderson pide ayuda a la llegada de la policía diciendo «alguien está tratando de matarme», aunque no se aprecia ninguna amenaza cercana. El agente le conmina en repetidas ocasiones a que se siente, algo que Anderson hace en un primer momento, para después escapar. Una vez es alcanzado por varios policías, el mismo agente le ordena varias veces que no se resista o, de lo contrario, le aplicará la pistola táser. Tras una serie de advertencias, el policía le aplica el arma electrificada.
El informe toxicológico ha revelado que Anderson se encontraba bajo los efectos de la cocaína y de la marihuana.
Según el relato de la policía, una ambulancia llegó cinco minutos después y trasladó a Anderson al hospital de Santa Mónica. Sin embargo, unas cuatro horas y media después, falleció a causa de un paro cardiaco.
