El país norteafricano llevó los restos de sus antiguos reyes a su nueva ubicación, en el Museo Nacional de la Civilización Egipcia
Las calles de El Cairo se trasladaron este sábado más de tres milenios atrás en el tiempo. La capital de Egipto asistió a un espectacular desfile en el que 22 momias de antiguos faraones, 18 reyes y cuatro reinas, fueron trasladadas desde su antigua ubicación en el Museo Egipcio al lugar que las acogerá a partir de ahora, el recién inaugurado Museo Nacional de la Civilización Egipcia.
El llamado ‘Desfile Dorado de los Faraones’ se desarrolló entre amplias medidas de seguridad por el incalculable valor de los restos arqueológicos. Además, se puso en marcha todo un operativo dirigido a que las momias no sufrieran ninguna clase de percance. Todos los sarcófagos se trasladaron en vehículos con amortiguadores especiales y a unos niveles de temperatura controlados gracias a unas cajas llenas de nitrógeno.
La procesión, asimismo, estuvo llena de gran boato en honor a los antiguos reyes egipcios. Cada momia viajó montada en un vehículo caracterizado y en el desfile participaron también réplicas de carros de guerra de la época.
