El Gobierno germano teme que los comicios vengan acompañados de ataques informáticos por parte de China y Rusia
Alemania celebrará este mes de septiembre un importante proceso electoral para poner fin a la era de Angela Merkel, que ha estado al frente del país germano desde hace dieciséis años.
Estas elecciones estarán marcadas por el bajo momento de los tradicionales partidos hegemónicos, los democristianos de la CDU y los socialistas del SPD, y por el auge en los últimos años de Los Verdes y de la extrema derecha que representa Alternativa Para Alemania.
Pero otro elemento amenaza con dejar su impronta en este proceso electoral, al margen de lo político. Y es que el Gobierno alemán teme que los comicios vengan acompañados de ataques informáticos y de desinformación por parte de China y sobre todo de Rusia. Así lo lleva advirtiendo la Unión Europea durante los últimos meses, que señaló a Alemania como el objetivo principal de este tipo de ataques.
En un clima político altamente condicionado por la pandemia y sus consecuencias, la amenaza de noticias falsas y accesos ilegales a datos se antoja más grave que nunca. Así lo ha confirmado la agencia federal de ciberseguridad alemana (BSI), que ha reportado un aumento en este tipo de ataques durante los últimos tiempos.
