El líder de Vox mantiene la esperanza de formar gobierno a pesar del «trato distinto» que denuncian tener por parte de los populares
El líder de Vox en Castilla y León, Juan García-Gallardo, ha reconocido este miércoles que la distancia que separa a su partido con el PP «aún es muy grande» porque los populares les quieren dar «un trato distinto» al que dieron a Ciudadanos, pero ha añadido que mantienen «la esperanza sobre la posibilidad de un acuerdo de gobierno».
Tras la fracasada reunión entre Tudanca y Mañueco que terminó con acusaciones cruzadas y reproches y en la que el popular denunció solo haber encontrado «rechazos, evasivas y silencios«, este miércoles ha sido el turno de reunirse con Vox para avanzar en las negociaciones para formar un gobierno en la región.
García-Gallardo ha manifestado en la rueda de prensa posterior al encuentro que «si Vox no entra en el Gobierno para cambiar el rumbo de la comunidad, Vox va a votar en contra». Además, ha señalado que el PP solo cuenta con dos alternativas: «O pacta con el PSOE o pacta con nosotros, pero no hay más».
Por su parte, Mañueco ha insistido en que «es pronto para hablar de la situación» que confirma algún pacto y ha recordado las tres opciones que contemplan para formar un gobierno en solitario: «Con el apoyo del PSOE, con el apoyo de Vox o con el apoyo de los partidos localistas y la abstención de PSOE o Vox».
Asimismo se ha mostrado firme en la decisión del partido de «agotar esta ronda de diálogo con todas las fuerzas políticas representadas en el arco parlamentario».
