El ministerio señala que la Seguridad Social continúa reflejando en sus cuentas el impacto de la emergencia sanitaria provocada por la pandemia
El déficit de la Seguridad Social se situó en 2.903,21 millones de euros en julio, lo que muestra una reducción del 43,8 % respecto a los 5.167,6 millones contabilizados en el mismo periodo de 2020, según los datos facilitados este viernes por el Ministerio de Seguridad Social.
El déficit registrado en los siete primeros meses del año, que equivale a un 0,24 % del producto interior bruto (PIB), es la diferencia entre unos derechos reconocidos (ingresos) de 100.799,69 millones, un 3,07 % en el mismo periodo de 2020, y unas obligaciones reconocidas (gastos) de 103.702,9 millones, que crecen en un 0,72 % interanual.
Al detalle de los ingresos, las cotizaciones sociales sumaron 74.384,61 millones, lo que supone un incremento del 7,77 % respecto al mismo periodo de 2020.
El ministerio señala que la Seguridad Social continúa reflejando en sus cuentas el impacto de la emergencia sanitaria provocada por la pandemia, con un incremento interanual de los ingresos por cotizaciones de los empleados del 9,25 % y de los desempleados del 8,39 %.
No obstante, ha cifrado que hasta el 31 de julio la Seguridad Social ha dejado de ingresar 1.204,16 millones de euros menos por las exoneraciones en las cotizaciones sociales de los trabajadores en Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), así como por la de los autónomos perceptores de prestaciones extraordinarias.
Las cuentas de la Seguridad Social reflejan también las transferencias recibidas por un total de 25.846,01 millones, entre las que destaca la partida de 23.312,25 millones del Estado y Organismos Autónomos, una cifra que ha disminuido un 9,89 %.
Este incremento ha estado fundamentado, principalmente, al efecto comparación con el mismo periodo del año pasado, en el que se recibió una transferencia del Estado para equilibrar el impacto derivado del covid-19.
En cuanto a las obligaciones o gastos, las prestaciones económicas a familias e instituciones alcanzaron los 96.933,53 millones, un 3,38 % más que en el mismo periodo de 2020.
La mayor partida, 89.304,64 millones, corresponde a pensiones y prestaciones contributivas, con un aumento de un 2,64 %.
Respecto a los subsidios de incapacidad temporal, el gasto total aumentó un 14,82 % respecto al mismo periodo del año anterior, hasta alcanzar los 7.209,22 millones en un contexto de la pandemia sanitaria.
Y las prestaciones en concepto de nacimiento y cuidado de menor se elevaron hasta los 1.896,33 millones, con un incremento interanual del 13,24 % tras ampliarse a 16 semanas el permiso para el segundo progenitor.
Fuente: EFE
