La proliferación de asesores y altos cargos ha disparado la factura que los españoles pagan por la oficina del presidente
Desde el momento en que llegó a La Moncloa, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, no se ha caracterizado precisamente por la austeridad. Tal vez el ejemplo más evidente es cómo ha disparado el número de ministerios, hasta 23, para dar encaje a Unidas Podemos dentro del Ejecutivo.
Pero no hay que irse tan lejos para observar los efectos del aumento del gasto por parte de Sánchez, basta con fijarse en el presupuesto asignado a la Presidencia del Gobierno, la Oficina que lleva los asuntos más íntimamente relacionados con el líder del Ejecutivo. A este departamento, adelanta el diario ABC, Sánchez dedica una media de 40 millones al año desde que llegó al poder.
Esta cifra convierte a Sánchez en el presidente más derrochador, superando en un 23% el gasto de su predecesor, Mariano Rajoy (32,4 millones en 2017), e incluso el de José Luis Rodríguez Zapatero (más de 31 millones en 2019).
Pero esto solo ha sido hasta ahora. Y es que Sánchez ha preparado un gasto significativamente mayor para este año: 47,5 millones de euros. Todo ello a pesar de que las apariciones públicas del presidente se han reducido en el último año y medio a causa de la pandemia.
Uno de los motivos que mejor explican cómo se ha disparado el gasto en Presidencia del Gobierno es el hecho de que este Ejecutivo cuenta con el mayor número de asesores de la historia. La última remodelación del Consejo de Ministros permitió a Sánchez batir el récord que él mismo había establecido, hasta alcanzar la astronómica cifra de 764 asesores contratados a dedo, un 27,5% más que Rajoy.
En concreto, en Presidencia del Gobierno trabajan 280 asesores, a los que hay que sumar una treintena de altos cargos.
