La postura del Gobierno ha sido considerada tibia y equidistante por la oposición
El Gobierno ha asegurado este martes que está “muy preocupado por Cuba” y que «España es una democracia plena que defiende la democracia, los derechos y las libertades», pese a que Podemos, su socio de Gobierno, ha negado que el actual régimen cubano sea una dictadura.
La postura del Gobierno ha sido considerada tibia y equidistante por la oposición, quien ha coincidido en mostrar su apoyo al pueblo cubano y pedir al presidente Pedro Sánchez una “condena expresa de la represión” desatada por el presidente cubano, Miguel Díaz Canel, contra los manifestantes.
Preguntada por la posición de Podemos, la portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, ha rehusado interpretar el ideario de otros partidos pero ha subrayado que España “defiende la democracia, los derechos y las libertades; esa es la posición de España», ha apostillado.
Además, tras expresar su preocupación por los periodistas que están trabajando en la isla, Rodríguez ha afirmado que están tomando las medidas oportunas para garantizar el derecho a que puedan informar de todo lo que ocurre en la isla.
Horas antes, el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, dedicaba su primer mensaje en Twitter a defender el derecho de los ciudadanos cubanos a manifestarse «libre y pacíficamente» y a pedir a las autoridades de la isla que respeten ese derecho y la «liberación inmediata» de la corresponsal de ABC Camila Acosta, detenida por informar de las manifestaciones de protesta que se están desarrollando en la isla caribeña contra el Gobierno.
Antes, el Ministerio había hecho público un comunicado en el que aseguraba que sigue «con mucho interés y muy de cerca» los acontecimientos y consideraba que «Cuba sufre una crisis en la que confluyen varios elementos» como la crisis económica y la caída del turismo por la covid y consideraba «necesario incrementar el ritmo de las reformas».
En respuesta, el secretario general del PP, Teodoro García Egea, ha exigido al Gobierno una condena expresa de la «represión» con que la «dictadura cubana» está intentando sofocar las protestas, mientras que otros dirigentes, como el portavoz de Internacional del partido, Pablo Hispán, ha calificado la declaración del Ministerio de “equidistante», lo que ha considerado «un mal comienzo» porque «no condena la represión ni apoya la demanda de libertad del pueblo».
«Sánchez debe tomar las riendas de su gobierno y no dejar que los ministros de Podemos ejecuten la política internacional», ha subrayado García Egea, cuyo partido ha anunciado que llevará a los Plenos de todos los ayuntamientos y gobiernos regionales una declaración institucional de apoyo al pueblo cubano en la que pedirá el cese de la violencia «injustificada» en la isla y que los cubanos «puedan elegir su futuro en libertad»
También Vox ha registrado una proposición no de ley para instar al Gobierno a «denunciar y condenar pública y rotundamente la represión de las manifestaciones pacíficas, la limitación de la libertad de expresión y la vulneración de los derechos humanos en Cuba» por considerar que la nota de Exteriores ha sido «tibia y carente de cualquier tipo de claridad».
Su portavoz, Iván Espinosa de los Monteros, ha pedido al nuevo ministro que haga gestiones diplomáticas para evitar la represión contra el pueblo cubano, que promueva acciones para conseguir «la inmediata liberación» de los detenidos, en particular, de los periodistas.
Por contra, Unidas Podemos, principal socio de Gobierno de Sánchez, ha negado que el gobierno de Cuba sea una dictadura, ha explicado la portavoz parlamentaria de En Comú Podem, Aina Vidal, quien no obstante ha considerado «importantísimo» que cada país tenga la capacidad de manifestarse.
También el diputado de Compromís Joan Baldoví ha considerado que ante esta crisis «hay mucha hipocresía» porque «se habla poco del embargo y de las consecuencias que provoca», y aunque ha negado defender el régimen autoritario de presidente cubano, ha censurado que Albares defienda a otro régimen autoritario como el de Marruecos «llamándole régimen amigo».
Por contra, Ciudadanos ha instado al Gobierno a que condene «sin ningún matiz» la «dictadura comunista» cubana y que apoye «el movimiento cubano» al tiempo que ha criticado la «tibieza» del Ejecutivo hacia el régimen de la isla para «no enfadar a su socio de Podemos», ha asegurado su portavoz, Edmundo Bal.
Además, la vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, también de Ciudadanos, ha ofrecido su respaldo a un grupo de cubanos concentrados frente al Congreso, a quienes ha ofrecido «todas las plazas libres» de la ciudad para que «denuncien la dictadura y luchen por la libertad».
Otro tanto ha hecho la portavoz de Vox en la Asamblea de Madrid, Rocío Monasterio, nacida en la localidad cubana de Matanzas, quien ha expresado su deseo de que «acabe la represión, el castrismo, que se juzgue a los asesinos y que el pueblo cubano recupere la dignidad, la libertad y el derecho que tiene a vivir en paz».
«Viva Cuba libre», ha gritado Villacís, quien ha afirmado: «los españoles estamos con los cubanos; lo que no sabemos es dónde y con quién está el Gobierno de Sánchez”.
Finalmente, la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) ha pedido la inmediata puesta en libertad de la corresponsal de ABC en Cuba y que el Gobierno español se interese por la situación de la corresponsal y haga las gestiones necesarias para que sea puesta en libertad sin cargos.
