La periodista independiente Camila Acosta ya ha sido arrestada en el pasado por el régimen castrista
La corresponsal del diario ABC en La Habana, Camila Acosta, fue detenida este lunes después de haber cubierto para el rotativo de Vocento las protestas contra el régimen que se han vivido en la capital cubana durante las últimas horas.
Las autoridades castristas se personaron en el domicilio de la reportera, lo registraron y requisaron su material de trabajo, incluido su ordenador personal.
Según informa ABC, Acosta será procesada por delitos contra la seguridad del Estado, un cargo esgrimido de forma habitual contra los disidentes del régimen. No es la primera vez que la periodista es arrestada por la dictadura castrista, además de haber sufrido el acoso de vecinos y otras personas vinculadas al régimen.
El presidente del Partido Popular, Pablo Casado, el portavoz de Vox en el Congreso, Iván Espinosa de los Monteros, y el portavoz nacional de Ciudadanos, Edmundo Bal, han condenado la detención y este atropello a la libertad de prensa. Por contra, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, aún no se ha pronunciado sobre nada de lo ocurrido en Cuba en las últimas 48 horas.
La FAPE pide la inmediata libertad de la corresponsal de ABC en Cuba
La Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) ha pedido este martes la inmediata puesta en libertad de la corresponsal de ABC en Cuba, Camila Acosta.
En un comunicado, la federación exige la retirada de los cargos contra Acosta, que puede ser procesada por presuntos delitos contra la seguridad del Estado, y pide al Gobierno español que se interese por la situación de la corresponsal y haga las gestiones necesarias para que sea puesta en libertad sin cargos.
La FAPE condena las agresiones y otros arrestos de periodistas que se han producido en Cuba en los últimos días cuando cubrían las manifestaciones de protestas (uno de los agredidos es el fotoperiodista español Ramón Espinosa, de la agencia Associated Press).
Y pide al Gobierno cubano que se responsabilice de la seguridad de los periodistas y que respete el libre ejercicio del periodismo, un elemento fundamental para garantizar el derecho de información de los ciudadanos.
«El acoso a los corresponsales tiene habitualmente como objetivo impedir que informen de hechos que, sin su trabajo, quedarían ocultos«, dice la FAPE, que recuerda al Gobierno cubano que el artículo 19 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos señala que «todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión».
«Este derecho -prosigue el artículo- incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión».
