La ministra que relevó al exvicepresidente en la cartera de Derechos Sociales se postula como relevo de Iglesias para liderar el partido morado
Apenas veinticuatro horas ha durado el luto en Unidas Podemos. Un día después de que Pablo Iglesias anunciase su dimisión de todos sus cargos en la formación morada y como representante público, la carrera por sucederle ya ha comenzado.
En las últimas horas, son varios los nombres que han sonado para luchar por el liderazgo de Podemos, entre ellos el de las ministras de Trabajo y de Igualdad, Yolanda Díaz e Irene Montero. Sin embargo, uno parece auparse sobre el resto de candidatas, el de la titular de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra.
Según adelanta ‘infoLibre’ y confirman otros medios, la última incorporación del Gobierno de Pedro Sánchez, que se incorporó al Consejo de Ministros como sustituta de Pablo Iglesias cuando este se embarcó en la fallida aventura de las elecciones madrileñas, sería la mejor colocada para optar a liderar Unidas Podemos.
Un perfil duro en la sombra
Más desconocida para el gran público que Díaz o Montero, Belarra lleva tiempo ocupando puestos de gran responsabilidad en el aparato del partido morado. Además de secretaria de Estado en el ministerio que dirigía Iglesias, la política pamplonesa de 33 años fue la encargada de representar la postura de Podemos durante sus negociaciones para formar gobierno con el PSOE tanto en el verano de 2019 (conversaciones que fracasaron) como en el invierno de ese mismo y año y que cuajaron en el actual Ejecutivo de coalición.
Belarra también ha defendido los postulados de Podemos a la hora de negociar con los socialistas otros asuntos claves, tales como los Presupuestos, la política de vivienda o la prohibición de los desahucios durante el estado de alarma.
Hasta ahora han sido pocas sus intervenciones públicas, aunque sí ha dejado ver su estilo directo y beligerante de marca Podemos en sus confrontaciones con la ministra de Defensa, la socialista Margarita Robles, a quien acusó en su día de dejarse adular por la derecha mediática o de ser «la ministra favorita de los poderes que quieren que gobierne el PP con Vox».
Bicefalia partido-Gobierno
El proceso de sucesión comenzará con la convocatoria de una Asamblea Ciudadana, el máximo órgano de Podemos, que designará a la nueva secretaria general, previsiblemente Belarra. Este nombramiento deberá ser ratificado por las bases del partido.
Además, la idea es que Belarra lidere la estructura orgánica de Podemos mientras que Yolanda Díaz lleve la voz cantante de la formación morada en el Gobierno, tal y como adelantó Pablo Iglesias al anunciar su dimisión como vicepresidente.
El motivo de que Díaz no aspire a dirigir también el partido es doble. Por una parte, la ministra de Trabajo no es afiliada de Podemos, sino del Partido Comunista, por lo que no aspira a cargos orgánicos. Por otro, dado su prudente silencio con respecto a la cuestión sucesoria desde que Iglesias la designase como su delfín, no parece que la vicepresidenta cuarta del Gobierno parezca demasiado interesada en liderar el partido. El tiempo dirá si este desinterés se aplica también a la posibilidad de ser la candidata de Podemos en unas elecciones generales.
