Desde el periódico EL MUNDO han tenido acceso a una conversación entre Álvaro González, presidente de la Empresa Municipal de la Vivienda (EMV), y el detective Julio Gutiez
El periódico EL MUNDO ha tenido acceso en exclusiva a una conversación telefónica entre el presidente de la Empresa Municipal de la Vivienda (EMV), Álvaro González, una empresa dependiente del Ayuntamiento de Madrid, y el detective al que se supone le encargaron el espionaje de Isabel Díaz Ayuso.
Esta conversación tuvo lugar en enero, en torno al día 11, aseguran desde EL MUNDO. Álvaro González intentó localizar al investigador privado, Julio Gutiez, a través de una llamada en la que decía: «Don Julio, soy Álvaro González, el presidente de la EMV», presentándose. «Le llamaba por si podíamos vernos para contrastar una información que me ha llegado si fuera posible», le explicaba. «Pues dígame cuándo», le contestó el detective. «Cuando a usted le venga bien, hoy o mañana», concluía Álvaro González.
En esta conversación que relata EL MUNDO, el detective preguntó a González que qué era exactamente lo que quería tratar con él. Ante esta pregunta, el presidente de la EMV le dijo: «Es para contrastar una información que me ha llegado», explicaba.
Según indican en EL MUNDO, esta insistencia por parte de González venía dada porque él había tenido conocimiento de que «trabajadores de su empresa se habían puesto en contacto con el Grupo de Investigación Mira para realizar un encargo concreto: conseguir datos bancarios y fiscales confidenciales del Tomás Díaz Ayuso, hermano de la presidenta madrileña», explican.
Desde EL MUNDO desvelan que concretamente se trataba de un extracto de su cuenta bancaria e incluso la declaración de Hacienda de la empresa a la que la Ayuso «adjudicó por 1,5 millones de euros un contrato para adquirir mascarillas en China, Priviet Sportive».
Además, el periódico no solo expone esta conversación entre el presidente de la EMV y el detective, sino que también aseguran desde EL MUNDO que esta información la recibió «el propio alcalde de Madrid a través de al menos dos personas: la propia Isabel Díaz Ayuso, que se lo comunicó personalmente el pasado 16 de diciembre, y el ex ministro Alberto Ruiz-Gallardón, que también tuvo conocimiento de los hechos y avisó al primer edil para que averiguara qué había ocurrido», indican.
En una conversación que ha tenido el detective con el canal 7NN, este aseguraba que, tras conocer el motivo de la consulta, lo primero que les dijo es que «era ilegal y que yo no hacía ninguna investigación ilegal», indicaba. «No era ni investigación, porque lo que querían eran unos datos muy concretos de la Agencia Tributaria y de un banco, de una caja», explicaba. Por ese motivo, asegura, se negó y «ahí quedó la historia».
