La intención del ministro de Seguridad Social es crear una ‘hucha’ que permanezca vigente durante 10 años para hacer frente al baby boom
El ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, ha presentado este martes a los agentes sociales su propuesta para sostener las pensiones en los próximos años, que supondrá una nueva subida de impuestos. Tal y como avanzan ABC y otros medios, la intención del Gobierno es subir las cotizaciones un 0,5 % durante una década a empresarios y trabajadores, para así crear una suerte de ‘hucha’ que sirva para atender las desviaciones de gasto previstas por la jubilación de la generación del baby boom.
El nuevo mecanismo de equidad intergeneracional se pondría en marcha en 2023 y estaría en vigor hasta 2032, verificándose cada tres años el nivel de gasto en pensiones previsto para 2050 por si hubiese que tomar nuevas medidas.
Este mecanismo planteado por Escrivá debería estar listo, en cuanto a su redacción, antes del 15 de noviembre, para ser introducido como enmienda en la reforma que tramita el Congreso de los Diputados. La nueva fórmula afectará de lleno al importe de las pensiones o al periodo de vida laboral, ya que tiene que corregir el desfase existente entre los ingresos y los gastos del sistema.
Aunque Escrivá considera que la reforma garantizará la «suficiencia» y «revalorización» de las pensiones, todas las miradas se dirigen ahora a la generación del baby boom, cuya jubilación a finales de la presente década se presume como un reto de dimensiones considerables para el sistema de pensiones. La elección entre trabajar un poco más o cobrar un poco menos que ya dejó caer el ministro de Seguridad Social hace meses tomará forma si la propuesta prospera.
