Ni el jefe del Gobierno catalán, Pere Aragonés, ni ningún consejero han asistido al acto, dando un nuevo plantón al monarca
El rey ha hecho un llamamiento este jueves en Cataluña a trabajar «estrechamente unidos» para despejar la incertidumbre y lograr encarar con éxito la recuperación y, en especial, a ayudar a los jóvenes para que «no sean los perdedores» de la crisis.
Felipe VI ha apelado a la unidad en la entrega de los premios de la Fundación Princesa de Girona (FPdGi) en el CaixaForum de Barcelona, al final de su tercera visita a la capital catalana en las dos últimas semanas, en la que ni el jefe del Gobierno catalán, Pere Aragonés, ni ningún consejero han asistido por el veto de la Generalidad a los actos vinculados con la Corona.
Además de Aragonés, vicepresidente de honor de la FPdGi, tampoco ha acudido la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, que tampoco lo hizo hace dos años.
La ceremonia ha contado con la intervención de la princesa Leonor, quien ha compartido con su padre que «proporcionar oportunidades» a las generaciones más jóvenes es «un deber que compromete a cualquier sociedad» y que la pandemia y sus consecuencias «lo hacen aún más necesario».
Como en la cena de bienvenida del Mobile World Congress en la capital catalana del pasado domingo, con Aragonés y el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, presentes, don Felipe ha hecho remarcado la importancia de arrimar el hombro entre todos en el actual contexto.
En su discurso en castellano, catalán e inglés, ha puesto énfasis en la urgencia de ayudar a los jóvenes a escapar de un desempleo «altísimo», que en España ronda el 37% entre los menores de 25 años.
