Su portavoz parlamentario, Patxi López, y la ministra de Justicia, Pilar Llop, discrepan con la última intervención sonada de la responsable de Igualdad, que no ha sentado nada bien en Ferraz
Las declaraciones de la ministra de Igualdad, Irene Montero, en las que ha acusado al PP de promover la cultura de la violación, han provocado malestar en el PSOE, cuyo portavoz parlamentario, Patxi López, ha dicho que no le han parecido «las mejores palabras después de todo lo vivido en el Congreso». «No me han parecido las mejores palabras después de todo lo que hemos vivido en este Congreso, y precisamente ella, que ha sufrido esa agresividad verbal, no debería jugar con esto«, ha declarado a los medios el portavoz del grupo socialista en el Congreso de los Diputados.
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Por su parte, fuentes de Ferraz han expresado también su descontento tras la polémica protagonizada por la ministra Irene Montero, de Unidas Podemos, al señalar que «el PP y sus socios de Vox quieren convertir el Congreso y el Senado en algo insoportable porque los ciudadanos los mandaron a la oposición» y que «todos debemos contribuir a evitar que lo logren».
Y desde el propio Gobierno la ministra de Justicia, Pilar Llop, no ha respaldado las palabras de Irene Montero y ha destacado que todas las fuerzas políticas que votaron a favor de la ley integral y el pacto de Estado contra la violencia de género, como fue el PP, «son partidos que están a la altura de las circunstancias«.
Durante el pleno del Congreso, Montero ha acusado al PP de «promover la cultura de la violación que pone en cuestión la credibilidad de las víctimas» en referencia a sendas campañas en las comunidades de Madrid y Galicia dirigidas a la mujer para evitar agresiones sexuales. En su cuenta de Twitter, Montero ha insistido en que «responsabilizar a las víctimas y no a los agresores en las campañas institucionales tiene un nombre» y ha adjuntado un documento de ONU Mujeres que explica «qué es la cultura de la violación».
La tensión de este miércoles llega después de que justo hace una semana la diputada de Vox Carla Toscano ofendiera a la ministra al señalar en el pleno que su único mérito era «haber estudiado en profundidad a Pablo Iglesias», lo que llevó a todos los grupos salvo a Vox a apostar por el autocontrol del lenguaje en sus intervenciones con el fin de mejorar el clima en el hemiciclo.
La tensión en el Congreso se ha incrementado en los últimos días con otros episodios, como el uso de la palabra filoetarra por parte de diputados de Vox para referirse a EH Bildu. Preguntado sobre si sería conveniente retirar este término del diario de sesiones, el portavoz parlamentario socialista ha respondido que es «decisión de la Mesa» del Congreso.
Fuente: EFE
