La Cancillería china defiende que el país «ha tomado posición abierta y transparente», además de compartir su experiencia en el control del covid-19, su diagnóstico y tratamiento
El debate sobre el origen del coronavirus sigue activo. El asesor de Seguridad Nacional de EE.UU., Jake Sullivan, indicó que China podría enfrentarse a «un aislamiento en la comunidad internacional» si decide no cooperar con investigaciones adicionales sobre los orígenes del coronavirus.
Pekín ha respondido a EE.UU. indicando que sus palabras son un «chantaje», y considera de «amenazas» las declaraciones de Sullivan, afirmó el portavoz de la Cancillería china, Zhao Lijian.
«Las declaraciones respectivas de la parte estadounidense son un abierto chantaje y amenazas. China expresa su fuerte descontento y se opone firmemente, nunca lo aceptaremos», indicó Lijian.
El portavoz de la Cancillería china ha querido dejar claro que China, desde el comienzo de la pandemia, «ha tomado posición abierta y transparente», además, ha compartido también con otros países su experiencia en el campo de la prevención y el control del covid-19, su diagnóstico y tratamiento.
«Las afirmaciones de que China dijo ‘no’ al estudio para rastrear el origen del coronavirus son completamente infundadas, y las declaraciones de que China se enfrentará a un aislamiento en la comunidad internacional son en mayor medida una intimidación intencional. El descubrimiento del origen del coronavirus es una cuestión científica que los científicos de todo el mundo tienen que abordar en cooperación y que no debe politizarse arbitrariamente; ese es el consenso de la gran mayoría de países», indicaba Zhao.
Pekín no solo ha acusado a EE.UU. de la presión que están ejerciendo sobre China, sino que, también, ha acusado a otros países de «politizar el tema del rastreo del origen» del virus.
Según contempla la OMS, el coronavirus surgió por la transmisión a partir de murciélagos hacia otro animal y, posteriormente, a los humanos, estas fueron las conclusiones que obtuvieron tras realizar una investigación sobre los orígenes del coronavirus. La OMS considera la posibilidad de que se debiera a una fuga de un laboratorio como «extremadamente improbable».
