Los servicios jurídicos de la Asociación Pro Guardia Civil (APROGC) presentaron una denuncia contra la consejería de Sanidad de la Generalidad por el plan de vacunación en Cataluña, ya que excluyeron del proceso a la Guardia Civil
Ante la negativa por parte de Cataluña por vacunar a los guardias civiles y policías nacionales, el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ordenó a la Generalidad el martes que, en el plazo de 10 días, garantizaran la vacunación a los agentes de la Guardia Civil y de la Policía Nacional en esta comunidad, con la misma proporción que los Mossos d’Esquadra.
Los servicios jurídicos de la Asociación Pro Guardia Civil (APROGC) presentaron una denuncia contra el «responsable» de la consejería de Sanidad de la Generalidad, Alba Vergés, por el plan de vacunación de los agentes de este cuerpo en Cataluña, ya que excluyeron del proceso de vacunación a la Guardia Civil.
La asociación subrayó que, la estrategia de vacunación contra el Covid-19 en España, contempla como grupo de población a vacunar a los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad por su «función esencial para la sociedad y por la dificultad de sustituirlos».
Sin embargo, la APROGC denunció que en Cataluña se excluyeron a los agentes de la Guardia Civil del plan de vacunación «por el simple hecho de serlo», por lo que la Generalidad «juega con los derechos de los guardias civiles así como con los de sus familias».
Vox, Cs y PPC echan en cara al Govern la discriminación de vacunas a policías
Vox, Ciudadanos y PPC han pedido explicaciones al Govern por la «discriminación» en el orden de vacunación a Policía Nacional y Guardia Civil con respecto a los Mossos d’Esquadra que ha ordenado revertir el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC).
En la sesión de control a los consellers, Lorena Roldán (PPC) ha calificado de «bochornosa» la diferencia de ritmo de vacunación en perjuicio a los policías nacionales y guardias civiles. «Se guían por el odio, no por criterio sanitarios», ha afirmado.
En ese sentido, también Joan Garriga (Vox) ha calificado lo ocurrido de «acto supino de sectarismo».
Por su parte, Matias Alonso (Cs) ha recordado la petición de la formación naranja de que se cese al secretario de Salud Pública de la Generalitat, Josep Maria Argimon, por sus declaraciones afirmando que vacunar a la Guardia Civil al mismo ritmo que a los Mossos implicará retrasar la vacunación de la gente de 70 años.
En respuesta a las preguntas parlamentarias en pleno, la consellera de Salud, Alba Vergès, ha defendido la estrategia de vacunación, que ha insistido, pasa «por vacunar a toda la población de Cataluña».
Al emplazamiento concreto de Garriga sobre que no «deje para el último día la vacunación de la Guardia Civil» y que la formación de ultra derecha estará «vigilando» que efectivamente se producen esas inoculaciones, Vergès ha respondido: «A este Parlament se viene a hacer política, no se viene a amenazar».
Asimismo, a las demandas sobre vacunación también ha respondido la consellera de Presidencia, Mertixell Budó, quien ha recordado que en vacunas están «a expensas» de las dosis que les llegan «del Estado» y que ha lamentado no tener «competencias» para tomar decisiones como el espaciado entre primera y segunda dosis para que la primera inoculación pueda llegar a más gente.
